La Navidad ya está aquí familias, y con ella, las vacaciones escolares que nos permiten disfrutar de más tiempo junto a nuestros hijos.
Más tiempo con los niños y con nuestros familiares y amigos que en ocasiones, nos hacen confiarnos, relajarnos y quizás bajar un poquito la guardia en cuanto a la vigilancia de nuestros hijos.
Este hecho, unido a la cantidad de adornos navideños que con mucha ilusión preparamos junto a los pequeños, las cocinas a pleno rendimiento, los frutos secos, turrones y alimentos que sin darnos cuenta dejamos al alcance de los niños, hacen que en la época navideña se disparen los índices de accidentes en los hogares -y fuera de ellos-.
Sin duda, los padres queremos lo mejor para nuestros hijos. Nadie quiere que les pase nada malo y ojalá pudiésemos evitar cualquier tipo de incidente que les pueda ocurrir, pero no podemos proteger a nuestros hijos en todo momento y por desgracia, los accidentes con niños ocurren a diario en todos los hogares.
Aún así, hay muchas situaciones que podemos prevenir siendo conscientes de los riesgos y peligros que tenemos en casa, acondicionando las diferentes estancias de nuestro hogar a las necesidades de nuestros hijos y cumpliendo unas medidas básicas de seguridad.
Un ambiente preparado para los niños, también en Navidad
En el post de hoy me gustaría repasar esas medidas básicas de seguridad y que tomemos consciencia de los espacios en los que se mueven nuestros hijos, si son realmente seguros para ellos o los podríamos mejorar.
Siempre me gusta recomendaros un ejercicio práctico que nos ayuda muchísimo a la hora de detectar esos peligros que acechan en casa a los niños y es darnos un paseo a gatas por toda la casa.
Al ponernos a su altura, nos resulta más fácil localizar qué peligros hay y cómo los podríamos disminuir, consiguiendo darles la autonomía que necesitan, pero con seguridad.
En muchas ocasiones, es tan fácil como poner un obstáculo ante ese enchufe o lámpara a la que no queremos que tengan acceso, cambiar el contenido de los muebles inferiores que pueden abrir, colocar seguros a los cajones o simplemente optar por una decoración más minimalista, quitando por un tiempo los elementos decorativos que puedan romper, con los que se puedan cortar o ingerir piezas pequeñas.
Todo pasa y esta época también lo hará, llegará el momento en el que echemos de menos a nuestros piratas de salón, ese desorden de juguetes y el no poder tener la decoración tal y como nos gustaría, mientras tanto disfrutemos y adaptemos las estancias a las necesidades de nuestros pequeños.
A continuación me gustaría hacer un repaso por los diferentes elementos que añadimos a nuestros hogares en Navidad y pueden suponer un riesgo para nuestros piratillas, ¿me acompañas?
Las luces de Navidad
Partiendo de la base de que ningún niño debería tener acceso y manipular aparatos eléctricos, las luces de navidad son muy golosas para ellos, llaman mucho su atención y las tienen a su alcance, por lo que si ven un cable suelto es probable que hagan por manipularlas y enchufarlas sin nuestra presencia.
Es muy importante que expliquemos a los niños que si las luces están apagadas deben avisar a un adulto para que las enchufe y que no deben manipularlas si están encendidas, que al hacerlo solitos pueden hacerse mucho daño.
Además, debemos asegurarnos que las luces cumplan con los requisitos de seguridad, no estén dañadas -al usarlas de año en año pueden sufrir deterioro y no darnos cuenta-, no dejar las luces encendidas durante toda la noche o sin supervisión, evitar que queden cables largos por el suelo a los que los niños puedan tener acceso y poner protectores a los enchufes, aunque esto es recomendable durante todo el año.
Velas, chimeneas y estufas
Las velas crean un ambiente mágico en Navidad, pero quizás mientras tengamos niños pequeños en casa, podríamos sustituirlas por velas led con batería, que también quedan muy bonitas y así evitamos el peligro de sufrir quemaduras.
En cuanto a chimeneas y estufas, es importante avisar a los niños cuando estén encendidas, mantenerlas limpias, sin cubrir en el caso de las estufas y alejada de los niños mediante barreras protectoras.
Y por supuesto, nunca dejar a niños solos jugando si hay chimeneas o estufas encendidas.
Decoración navideña a prueba de niños
Es probable que tengas que adaptar la decoración de navidad durante unos años.
Revisar si los elementos decorativos que tienes en casa son seguros para los niños, que no contengan piezas pequeñas que puedan desprenderse con facilidad y puedan ingerir o que puedan romperse y ocasionar cortes a los pequeños.
Es inevitable que los niños jueguen con los adornos del árbol de navidad y las figuritas del portal de Belén, por lo que debemos priorizar por encima de todo, que sean seguros para ellos, ya tendremos tiempo de volver a poner esos adornos que tanto nos gustan.
Así que recuerda, adornos de grandes dimensiones, irrompibles y que no puedan desmontarse en piezas pequeñitas.
Cuidado con la cocina
Hornos y fogones encendidos, ollas hasta arriba de sopas, encimeras llenas de cuchillos y utensilios cortantes, muchos adultos cocinando y ayudando con la elaboración del menú que vamos a degustar y niños jugando o correteando alrededor.
Nos perdemos en la vorágine de preparativos con nuestros familiares y seres queridos y sin querer, dejamos de prestar atención a los más pequeños, por lo que en un segundo puede producirse cualquier incidente.
En estas fechas es preferible mantener a los niños alejados de la cocina, establecer espacios de juegos adaptados según sus edades y que siempre haya alguien supervisando qué están haciendo.
Ojo con responsabilizar a los niños más mayores del cuidado de los pequeños, también siguen siendo niños.
Alimentos con riesgo de atragantamiento para los más pequeños
Es habitual que en las sobremesas estén presentes los frutos secos, turrones, caramelos y en Nochevieja, las uvas.
A la hora de comer, tenemos que vigilar que estos tipos de alimentos no estén al alcance de los más pequeños ya que en cualquier descuido, pueden acceder a ellos y llevarnos un buen susto.
Las uvas son unas de las principales causas de atragantamiento en niños, por lo que debemos cortarlas adecuadamente a los menores de doce años y que en vez de tomar doce uvas, coman doce trocitos de uva.
En fin de año, los nervios, la ilusión, las prisas y las características de este alimento pueden hacer que se produzca cualquier incidente que nos amargue las fiestas y que podríamos haber evitado.
Juegos, juguetes y disfraces
En esta época del año, gracias a la labor de Papá Noel y sus Majestades de Oriente, llegan a casa nuevos juegos y juguetes que debemos revisar antes de entregarselos a los más pequeños.
Leer las instrucciones de uso, tener en cuenta las edades recomendadas por el fabricante por si tienen elementos o piezas pequeñas que puedan ingerir, que las pilas queden bien protegidas e inaccesibles para los niños y cualquier otra indicación del fabricante.
Por supuesto, debemos comprobar que contengan el sello de CE, que nos asegura que ha sido fabricado cumpliendo con los requisitos de seguridad que exige la Unión Europea.
Tener cuidado con los juguetes de madera, que sean de buena calidad, que no contengan astillas, bordes o aristas que puedan cortar y que las pinturas utilizadas no sean tóxicas para los niños, al igual que los maquillajes y lacas de uñas infantiles, no todos los que venden en el mercado están correctamente adaptados a los niños.
También es importante asegurarnos de que los disfraces navideños cumplan con la legislación vigente de la Comunidad Europea, que no sean inflamables, que estén adaptados a la edad de nuestros hijos y que no lleven cordones y elementos pequeños que se puedan desprender provocando asfixia.
Tener en casa niños de diferentes edades implica que haya juegos y juguetes que pueden resultar peligrosos para los más pequeños. Cuando estén jugando juntos, los niños deben estar siempre bajo nuestra supervisión.
Hasta aquí el artículo de hoy, espero que te sirva de ayuda para adaptar tu hogar a las necesidades de tus hijos -durante estas fiestas y el resto del año-.Mi intención no es alarmarte, es hacerte consciente de los peligros que sin darnos cuenta tenemos al alcance de nuestros hijos en casa y ofrecerte un resumen de los aspectos más importantes que debemos analizar y tener en cuenta para poder disfrutar de unas felices fiestas con niños en casa, evitando riesgos innecesarios y que esta navidad quede en nuestra memoria por los buenos momentos que hemos pasado junto a nuestros hijos, familiares y amigos.
Te animo a dejar en comentarios qué te ha parecido este artículo, si te ha resultado útil, has detectado algún punto que podrías mejorar en tu hogar o si añadirías alguna recomendación a este post. Te leo un poquito más abajo.
Un abrazo y gracias por estar aquí,
Photo by Fran Jacquier on Unsplash
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